En nuestro artículo de ¿Qué es un Líder?, abordamos la definición y características del Líder Catalizador. Hoy, profundizaremos en un aspecto fundamental del liderazgo efectivo: la importancia del Liderazgo de Líderes, y no de seguidores.
La realidad de un empresario: De la ilusión a la ansiedad
El otro día me llamó un buen amigo empresario, que además es cliente. Tenía ganas de hablar y desahogarse. Quedamos, y me empezó a decir:
«Estoy cansado, gris… en la empresa, donde antes tenía ilusión, ganas y empuje, ahora no veo más que obstáculos y muros infranqueables. La responsabilidad que antes asumía con entusiasmo, ahora me causa ansiedad y desasosiego.»
La conversación transcurría por unos derroteros nada gratificantes, ni constructivos. Fue entonces cuando le pregunté:
- ¿Cómo medirías la eficacia del liderazgo de un directivo?
La verdad es que se quedó un tanto desconcertado por la pregunta, y no alcanzó más que a decir un convencional: “Aquel que con el mínimo de recursos obtiene el máximo de resultados.» Le comenté que esa respuesta sonaba un poco de «manual», y le ofrecí una definición un tanto macabra, pero mucho más cercana a nuestra realidad empresarial:
«La eficacia del liderazgo de un directivo se mide por el tiempo que pueda estar muerto en su despacho sin que nadie se entere«. Esta, le expliqué, es la esencia del Liderazgo de Líderes.
¿Qué es un Liderazgo de Líderes?
Mi amigo, sorprendido por esta definición, me pidió que profundizara. Lo que quería decir con Liderazgo de Líderes es que un directivo eficaz debe lograr que su equipo esté tan bien capacitado y organizado que pueda funcionar perfectamente incluso sin su intervención constante.
Para lograr esto, el liderazgo de un directivo debe cumplir con varios requisitos fundamentales:
- Contar con profesionales capacitados y formados:
Es esencial que los miembros del equipo estén suficientemente preparados para asumir sus responsabilidades sin necesidad de supervisión continua. - Claridad en roles y responsabilidades:
Cada miembro debe saber exactamente lo que se espera de él y cuáles son sus funciones y responsabilidades dentro de su departamento y de la empresa. De esta forma, que no habrá cosas que se queden sin resolver, o lo que es peor, que se resuelvan por partida doble y con criterios distintos. - Trabajo en equipo coordinado:
El trabajo debe ser colaborativo, con un equipo que se apoye mutuamente y esté enfocado en los objetivos comunes, tanto personales como empresariales previamente marcados. - Libertad para tomar decisiones:
Y, por último, y quizás lo más importante de todo… Dentro de sus responsabilidades, los miembros del equipo deben tener la libertad de actuar con autonomía para tomar las decisiones necesarias, siempre dentro de los principios éticos y la cultura empresarial.
Bueno… y entonces ¿él que hace? Me preguntó. Muy sencillo, le contesté. ¡Estar pendiente del futuro para que cuando este llegue, no le coja con el paso cambiado!
El cambio de mentalidad: De jefe a líder
La clave del Liderazgo de Líderes es entender que el verdadero líder debe rodearse de personas competentes, capaces de asumir responsabilidades. Un equipo que depende de un líder para todo, se convierte en un equipo de seguidores en lugar de líderes de sus propias áreas. Este enfoque limita el crecimiento tanto individual como colectivo.
Le expliqué a mi amigo que, si siempre se rodea de personas que se limitan a hacer lo que él quiere, se estará creando un entorno donde la creatividad y la toma de decisiones están centralizadas en él. Esto genera un ciclo dependiente y tóxico donde el líder se convierte en el único punto de referencia.
El impacto del coaching en el liderazgo del directivo
El coaching interviene de una forma decisiva en este proceso. Ayuda a los directivos a tomar conciencia de su rol y a entender las preguntas clave que deben hacerse para mejorar su liderazgo. Dos preguntas fundamentales son:
- El primer aspecto tiene que ver con responderse a la siguiente cuestión: ¿Cuál es mi papel dentro de la empresa? o dicho de otra forma más coloquial: ¿Para qué me está pagando mi empresa?
Cuando un directivo se plantea esta pregunta, puede descubrir que está asumiendo tareas que no le corresponden y que podrían ser delegadas. ¿Qué resultados obtiene actuando así? Rodearse de un equipo que se limita a hacer lo que él quiere y como a él le gusta, lo que puede dar lugar a que el CLIENTE de su equipo sea ÉL y no quien paga las facturas.
Mi amigo empresario empezó a confesar que sentía que con su proceder había contribuido a crear un equipo de “seguidores” dependientes de él y no de “líderes de su trabajo”, y esa era una losa que cada vez le pesaba más.
Una persona preparada y con criterio como tú, le comenté: «¿Cómo te sentirías si alguien te estuviera diciendo continuamente lo que tienes que hacer y cómo lo tienes que hacer?«. «¡Castrado mentalmente!» Me contestó.
Ser un “correveidile” es lo más alienante que una persona puede sentir. “Lo importante no es saber, sino tener el teléfono de quien sabe” le comentaba. La esencia del liderazgo del directivo es reconocer que somos distintos, ni mejores ni peores, sino simplemente distintos, e integrar esas diferencias en beneficio del equipo, la empresa y el proyecto empresarial.
Ante una misma situación, es poco probable que todos actuemos igual. El que lo hagamos de forma diferente significa que tenemos distintos puntos de vista, ideas, capacidades… y en eso, precisamente, reside la grandeza de las personas y el crecimiento del profesional y de la empresa: “Si en una empresa, dos piensan lo mismo, uno de los dos sobra”.
- El segundo aspecto significativo se relaciona con la pregunta que le lancé a mi amigo: ¿Qué te impide aceptar lo que cada miembro de tu equipo te puede aportar?
Fue entonces cuando él empezó a descubrir que no quería que nadie pudiera hacerle “sombra”, disfrazado con la máscara de “sentirse importante”. Además vio que con esa forma de proceder reproducía un estilo directivo que, en los inicios de su empresa le había resultado exitoso, y que no era más que aquel en el que él era el líder pensador y ejecutor de su empresa, pero, liderazgo que, con el tamaño y dimensión de la empresa en el momento actual, le restaba agilidad, flexibilidad, eficacia y sobre todo… conocimiento y creatividad a la hora de competir y de dar pronta respuesta al mercado.
Todo su equipo se limitaba a hacer lo que era conveniente… según los dictados de su jefe.
El coaching le ayudó a visionar la importancia del Liderazgo de Líderes, y dejar de percibir como amenaza la inteligencia, criterio y personalidad que pudiera tener cada uno de los miembros de su equipo directivo. Y con ello, a descubrir otra forma de dirigir: el desarrollo del potencial a través de un Liderazgo de líderes y no de seguidores.
De seguidores a líderes: Cómo crear un equipo empoderado
Tradicionalmente se nos ha enseñado a “reproducir” un método de trabajo. Con ello, lo que hacemos es hacer que la responsabilidad sobre lo que yo haga (mi vida), descanse en los demás (padres, jefes, profesores, etc.), y por otra parte, acomodarme a repetir lo que los demás dicen que haga, limitando con ello mi creatividad y desarrollo profesional.
Muchas de las veces, el método lo reproducimos de forma invariable y sin tener en cuenta el entorno donde debemos de aplicarlo.
Su equipo buscaba respuestas que resolvieran sus problemas, y en él siempre las encontraban, haciendo, con ello, al equipo dependiente de su jefe y sin posibilidad de aprender y crecer profesionalmente.
¿Cuál sería la forma de liderazgo que tú podrías practicar que estimulara el sentimiento de pertenencia y el empoderamiento de tu equipo? Le pregunté. “Alguna que tuviera que ver con el permitir el reconocimiento, la iniciativa y el desarrollo del potencial de cada una de las personas de mi equipo”, me contestó.
El coaching contribuyó a que él desarrollara su liderazgo para que cada miembro de su equipo fuera siendo responsable y capaz de encontrar las respuestas en ellos mismos, “liderándose” como profesionales hacia el objetivo común y compartido de la empresa, y no limitándose a ser “seguidores” de “la voz de su amo”.
Conclusión: ¿Qué tipo de líder quieres ser?
Si crees en la importancia del Liderazgo basado en que los miembros de tu equipo sean “líderes” en su desempeño y profesionalidad, y no se queden en meros “seguidores” de órdenes que les dan; te invito a que conozcas nuestro servicio de coaching profesional, para empresas, directivos y profesionales, donde encontrarás información de cómo el coaching profesional puede ayudarte a desarrollar y potenciar tu Liderazgo.
Fco. (Quico) Blanes / Crecer Talento